Ahora que ya está la cosa superada se cuenta mucho más fácil, pero no lo ha sido tanto. Aitana, es muy especial, y cosa que entiendo perfectamente, no quería otra cosa que fuese teta, ni chupetes, ni biberones, solo teta. Esto que parece muy simple trae muchas complicaciones, y los padres (y madres) que hayan pasado por algo parecido lo comprenderán. Después de mucha búsqueda y la ayuda de los foros Elena encontró el biberón TOMMEE TIPPEE, que tiene una tetina que simula el pecho de la madre. Poco a poco y con mucho esfuerzo, paciencia y algún que otro momento de estrés lo hemos conseguido, y ahora ya coge otras tetinas, lo que supone una verdadera liberación. Para la madre porque deja de ser esclava de horarios y tomas, que la lactancia materna es barata y muy sana, pero muy esclava, y para el padre que ya tenía ganas de dar de comer a su pequeña. Sin contar con la alegría que esto supone para abuelas y tías que también quieren participar.
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